Opiniones personales:
Silvia Sanchez Ramires
En mi opinión personal, la deuda externa y sus posibles consecuencias económicas en nuestro futuro, debe ser ser atendido con urgencia, tomando una postura responsable, democrática, justa. Pues, la cuestión económica es un central en nuestras vidas. Y la verdad, de acuerdo con lo que expusimos en el blog, endeudarse al país no le sirvió para industrializarse, ni para aumentar el empleo ó mejorar las condiciones de la vida de la gente, sino para financiar un modelo que nos excluye a la mayoría, beneficiados a grandes intereses.
Llegado a este punto, considero que es necesario proponer una auditoria para determinar si la deuda es legitima o no, que certifique lo que hay que pagar y lo que no . Además, si es posible se investigue el rol de los funcionarios que intervinieron en el proceso de endeudamiento. La realizacion del blog me gusto y lo disfute mucho.
Stella Maris Obregon :mi opinión personal sobre la deuda externa antes pensaba que pagar era la solución ahora cuanto mas me informo pienso que no hay que pagar !! En el plano económico social enfrentar la deuda exige considerar no solo la relación con los acreedores si no definir la distribución de la carga que supone atender sus servicios de la sociedad. También en el plano económico social enfrentar la deuda exige ,considerar no solo la relación con los acreedores si no definir la distribución de la carga que supone atender sus servicios de la sociedad .Si no ponemos a pensar la deuda asciende a mas de 150 mil millones de dolares, que equivalen a cada uno de nosotros los argentinos pagar 28 dolares mensuales durante toda la vida y solo se pagaría los intereses,esta es mi opinión en lo personal. Y respecto si me gusto hacer este blog? si me gusto hacerlo y este trabajo también por supuesto, y compartir con mis compañeros de grupo distintas opiniones y investigar sobre el tema y ver diferentes opiniones . Fue un gusto cursar esta materia "economía "con usted profesor ,Muchas gracias !!!
Roberto Ponce: considero que el pago de la deuda debe hacerse en forma efectiva. por la forma en que se ha manejado el gobierno y su planteo de negociacion proponiendo condiciones, y por sobre todo la necesidad de mantener nuestra soberania mediate el pago.
domingo, 26 de octubre de 2014
Documento acerca...
DEUDA
PÚBLICA Y CONFLICTO POLÍTICO;
HACIA UNA REFINANCIACIÓN EFICAZ, EN EL MARCO DE UN PROYECTO DE DESARROLLO INCLUSIVO
La deuda pública externa ha sido un condicionante central, en el escenario económico y político dela
Argentina ; su continua expansión a lo largo de los últimos
treinta años ha constituido uno de los más formidables obstáculos para el
crecimiento del país. Un país no pobre; pero empobrecido entre otras razones
por el endeudamiento; esto es la resultante de políticas económicas perversas,
reflejo de intereses y desvaríos de elites de poder carentes de proyectos
viables y aceptables para las mayorías.
Tras la declaración de default a fines del año 2001 y la posterior renegociación de los pasivos externos, los compromisos de pago adquirieron un perfil sostenible; puede afirmarse que la deuda no representa hoy día un obstáculo central para la economía.
Sin embargo, la sociedad ha asistido en los últimos meses a un persistente conflicto político, originado por un conjunto de decisiones en torno a la deuda pública - ahora parcialmente en manos de acreedores locales. Este conflicto ha atravesado circunstancias álgidas, motivando enfrentamientos públicos de actores políticos de fuste, oficialistas y opositores, y ha involucrado en reiteradas oportunidades a instancias del Poder Judicial. El conflicto ha girado tanto en torno de cuestiones de fondo como de procedimiento.
El origen de estos episodios se encuentra en la atención de los servicios de la deuda pública y en la reapertura de negociaciones con los tenedores de títulos que no se avinieron a su canje en el año 2005. El Gobierno Nacional propuso primero garantizar el pago de obligaciones – a través del “Fondo del Bicentenario”–; luego, optó directamente por movilizar reservas para la cancelación de los vencimientos, mediante la creación del “Fondo de Desendeudamiento Argentino”. Éste último habilitaría la cancelación de obligaciones sin contraer el gasto fiscal destinado a otros fines.
Frente a la controversia suscitada, desde el Plan Fénix hacemos llegar a la sociedad nuestro aporte para la comprensión de esta problemática. Brindamos también nuestro punto de vista acerca de los cursos de acción a seguir. Todo ello, como siempre, considerando el interés colectivo, y desde una perspectiva de largo plazo.
En primer lugar, compartimos una opinión generalizada entre analistas de diversas vertientes, en el sentido de que la actual coyuntura económica no evidencia síntomas de gravedad. En términos de nivel de actividad y del sector externo,la Argentina
enfrenta en relativamente buenas condiciones la gran crisis mundial, originada
en el sector financiero de los países desarrollados. Ello, además, a pesar de
una sequía inédita, que contribuyó a que en el año 2009 cayeran en un 30% las
producciones agrarias exportables, afectando además la recaudación fiscal.
Indicadores macroeconómicos fundamentales, como ser el nivel de actividad y los
saldos de los sectores público y externo, lucen tanto o más sólidos que los de
otras economías latinoamericanas.
Las perspectivas a corto plazo resultan también alentadoras, aunque no sugieran un camino totalmente despejado. La situación fiscal, si bien desmejorada con relación a 2008 por pérdidas de recaudación y por una política de corte expansivo, muestra a nivel nacional indicadores que perfilan una situación manejable, en términos de desbalances. Esto no impide que se adopten con oportunidad y eficacia medidas necesarias para reequilibrarla, en el proceso de salida de la “fase baja del ciclo”, consecuencia de la crisis global. En el caso de las finanzas provinciales, los desequilibrios requieren intervenciones de alguna magnitud, sin que por ello los riesgos sean pronunciados. Por cierto, el reavivamiento de la inflación constituye un punto que requiere la máxima atención, dadas las tendencias de los últimos tres años y los visibles deslizamientos de hoy, en un marco de recuperación del ritmo de crecimiento
En este contexto, no es improcedente avanzar hacia una negociación que permita incorporar al canje la mayor cantidad posible de deuda pendiente (en manos de los holdouts), como así también renovar los vencimientos de capital. Los niveles actuales de deuda son claramente sostenibles, al representar cerca del 45% del Producto Interno Bruto. Es correcto en consecuencia renovar vencimientos, cuidando de no incrementar este porcentual.
Es crucial, sin embargo, que esta negociación permita obtener tasas de interés compatibles con el crecimiento, similares a las que han obtenido otros países. El tratamiento que recibe hoy día la deuda del país en los mercados internacionales no refleja su mejor situación relativa. Si bien ha crecido el precio de los bonos argentinos, ante la expectativa de aprobación del canje de deuda por parte dela
Comisión Nacional de Valores (SEC) de los Estados Unidos, las
tasas de interés implícitas son aún muy elevadas, sobre todo en comparación con
otros países de similar o peor desempeño macroeconómico. De aceptar la Argentina tales tasas,
se estaría emitiendo una señal de insolvencia, que no encuentra justificación
alguna. Sin duda, persisten gruesas fallas en la evaluación del riesgo, por
parte del mercado financiero internacional.
En tal sentido, el uso de las reservas para la cancelación de vencimientos es un camino adecuado, sólo en la medida en que coadyuve a este propósito de reducción del costo del endeudamiento. Y bajo ningún concepto, el propósito debe ser algún deseable “retorno a los mercados”, como reclaman en forma monótona los voceros de las finanzas especulativas. Nunca más el endeudamiento público debe ser el camino a seguir, vista la nefasta experiencia argentina.
Por otra parte, los niveles de los pasivos actuales y la abundante disponibilidad de reservas permiten afectar sin riesgos mayores parte de ellas, a los fines de cubrir los servicios de la deuda; ello permite liberar recursos para expandir la demanda interna, en la medida en que ello sea necesario y viable, conforme la evolución del ciclo económico. Sin duda, esto implica atender la deuda con reservas; pero esta vía nada especial significa, toda vez que siempre la deuda pública denominada en moneda extranjera se atiende utilizando las reservas que la sociedad guarda en el Banco Central. El punto básico reside aquí en no reducir los recursos fiscales necesarios para una política contracíclica, oportuna en estas circunstancias, mal que les pese a los voceros del ajuste recesivo. Por otro lado, es menester que el Presupuesto General dela Nación
sea adecuadamente reformulado, a fin de incorporar estas previsiones.
Resulta claro que el actual cuadro de conflicto se origina más en la dinámica política que en el frente económico (con la salvedad de lo ya mencionado acerca de la inflación); y ésta por cierto es una apreciación que también comparten distintos analistas. Pero debe advertirse que a la larga, esta dinámica podrá afectar el plano económico, y en definitiva la vida del colectivo social. Por lo pronto, los “ruidos” políticos actuales en nada ayudan, por cierto, a esclarecer la real situación del país, frente a los acreedores.
Es imperativo entonces que la dirigencia alineada con un proyecto de desarrollo inclusivo esté dispuesta a actuar en consecuencia, construyendo los necesarios acuerdos que permitan apuntalar y no socavar una situación económica que luce sostenible.
Ello implica resignar posicionamientos que reflejan intereses personales, sectoriales, proselitistas o de mera búsqueda de acrecentar el poder político, respetando a la vez las formas y pautas institucionales. Lo que urge ahora es liberar energías transformadoras para encarar la deuda social, que representa la exclusión de uno de cada cinco argentinos.
Desde el Plan Fénix, exhortamos entonces a esta dirigencia a encarar la tarea. Lo hacemos desdela
Universidad , y además desde un proyecto que agrupa a docentes
e investigadores de diferentes tradiciones, orientaciones político-ideológicas
o partidarias, en una experiencia que ha demostrado que tales diferencias no
impiden trabajar en pro de objetivos comunes.
Plan Fénix
Buenos Aires, marzo de 2010
HACIA UNA REFINANCIACIÓN EFICAZ, EN EL MARCO DE UN PROYECTO DE DESARROLLO INCLUSIVO
La deuda pública externa ha sido un condicionante central, en el escenario económico y político de
Tras la declaración de default a fines del año 2001 y la posterior renegociación de los pasivos externos, los compromisos de pago adquirieron un perfil sostenible; puede afirmarse que la deuda no representa hoy día un obstáculo central para la economía.
Sin embargo, la sociedad ha asistido en los últimos meses a un persistente conflicto político, originado por un conjunto de decisiones en torno a la deuda pública - ahora parcialmente en manos de acreedores locales. Este conflicto ha atravesado circunstancias álgidas, motivando enfrentamientos públicos de actores políticos de fuste, oficialistas y opositores, y ha involucrado en reiteradas oportunidades a instancias del Poder Judicial. El conflicto ha girado tanto en torno de cuestiones de fondo como de procedimiento.
El origen de estos episodios se encuentra en la atención de los servicios de la deuda pública y en la reapertura de negociaciones con los tenedores de títulos que no se avinieron a su canje en el año 2005. El Gobierno Nacional propuso primero garantizar el pago de obligaciones – a través del “Fondo del Bicentenario”–; luego, optó directamente por movilizar reservas para la cancelación de los vencimientos, mediante la creación del “Fondo de Desendeudamiento Argentino”. Éste último habilitaría la cancelación de obligaciones sin contraer el gasto fiscal destinado a otros fines.
Frente a la controversia suscitada, desde el Plan Fénix hacemos llegar a la sociedad nuestro aporte para la comprensión de esta problemática. Brindamos también nuestro punto de vista acerca de los cursos de acción a seguir. Todo ello, como siempre, considerando el interés colectivo, y desde una perspectiva de largo plazo.
En primer lugar, compartimos una opinión generalizada entre analistas de diversas vertientes, en el sentido de que la actual coyuntura económica no evidencia síntomas de gravedad. En términos de nivel de actividad y del sector externo,
Las perspectivas a corto plazo resultan también alentadoras, aunque no sugieran un camino totalmente despejado. La situación fiscal, si bien desmejorada con relación a 2008 por pérdidas de recaudación y por una política de corte expansivo, muestra a nivel nacional indicadores que perfilan una situación manejable, en términos de desbalances. Esto no impide que se adopten con oportunidad y eficacia medidas necesarias para reequilibrarla, en el proceso de salida de la “fase baja del ciclo”, consecuencia de la crisis global. En el caso de las finanzas provinciales, los desequilibrios requieren intervenciones de alguna magnitud, sin que por ello los riesgos sean pronunciados. Por cierto, el reavivamiento de la inflación constituye un punto que requiere la máxima atención, dadas las tendencias de los últimos tres años y los visibles deslizamientos de hoy, en un marco de recuperación del ritmo de crecimiento
En este contexto, no es improcedente avanzar hacia una negociación que permita incorporar al canje la mayor cantidad posible de deuda pendiente (en manos de los holdouts), como así también renovar los vencimientos de capital. Los niveles actuales de deuda son claramente sostenibles, al representar cerca del 45% del Producto Interno Bruto. Es correcto en consecuencia renovar vencimientos, cuidando de no incrementar este porcentual.
Es crucial, sin embargo, que esta negociación permita obtener tasas de interés compatibles con el crecimiento, similares a las que han obtenido otros países. El tratamiento que recibe hoy día la deuda del país en los mercados internacionales no refleja su mejor situación relativa. Si bien ha crecido el precio de los bonos argentinos, ante la expectativa de aprobación del canje de deuda por parte de
En tal sentido, el uso de las reservas para la cancelación de vencimientos es un camino adecuado, sólo en la medida en que coadyuve a este propósito de reducción del costo del endeudamiento. Y bajo ningún concepto, el propósito debe ser algún deseable “retorno a los mercados”, como reclaman en forma monótona los voceros de las finanzas especulativas. Nunca más el endeudamiento público debe ser el camino a seguir, vista la nefasta experiencia argentina.
Por otra parte, los niveles de los pasivos actuales y la abundante disponibilidad de reservas permiten afectar sin riesgos mayores parte de ellas, a los fines de cubrir los servicios de la deuda; ello permite liberar recursos para expandir la demanda interna, en la medida en que ello sea necesario y viable, conforme la evolución del ciclo económico. Sin duda, esto implica atender la deuda con reservas; pero esta vía nada especial significa, toda vez que siempre la deuda pública denominada en moneda extranjera se atiende utilizando las reservas que la sociedad guarda en el Banco Central. El punto básico reside aquí en no reducir los recursos fiscales necesarios para una política contracíclica, oportuna en estas circunstancias, mal que les pese a los voceros del ajuste recesivo. Por otro lado, es menester que el Presupuesto General de
Resulta claro que el actual cuadro de conflicto se origina más en la dinámica política que en el frente económico (con la salvedad de lo ya mencionado acerca de la inflación); y ésta por cierto es una apreciación que también comparten distintos analistas. Pero debe advertirse que a la larga, esta dinámica podrá afectar el plano económico, y en definitiva la vida del colectivo social. Por lo pronto, los “ruidos” políticos actuales en nada ayudan, por cierto, a esclarecer la real situación del país, frente a los acreedores.
Es imperativo entonces que la dirigencia alineada con un proyecto de desarrollo inclusivo esté dispuesta a actuar en consecuencia, construyendo los necesarios acuerdos que permitan apuntalar y no socavar una situación económica que luce sostenible.
Ello implica resignar posicionamientos que reflejan intereses personales, sectoriales, proselitistas o de mera búsqueda de acrecentar el poder político, respetando a la vez las formas y pautas institucionales. Lo que urge ahora es liberar energías transformadoras para encarar la deuda social, que representa la exclusión de uno de cada cinco argentinos.
Desde el Plan Fénix, exhortamos entonces a esta dirigencia a encarar la tarea. Lo hacemos desde
Plan Fénix
Buenos Aires, marzo de 2010
Publicado por Grupo de Voluntarios del
Museo de la Deuda Externa de la UBAen 11:18No hay comentarios:
viernes, 24 de octubre de 2014
Cristina envía proyecto de ley para cambiar a Buenos Aires el lugar de pago a bonistas y reabrir el canje
La Presidente anunció que mandará la iniciativa "del pago soberano local de la deuda exterior de la República Argentina". Ofrece un cambio voluntario del lugar de pago para abonar en Argentina y para ello se declarará de "interés público" la reestructuración de 2005 y 2010. Permitirán el cobro de los títulos al 100% por eso se reabre el canje bajo las condiciones del original. Además se cambia el BoNY como agente fiduciario por un fideicomiso en el Banco Central, así "nadie podrá tocar (esos fondos), porque son de nuestros acreedores", explicó. En un discurso en donde cargó duro contra Griesa y los buitres advirtió que "esto es para los futuros gobiernos".
Cristina de Kirchner en cadena nacional.
La Presidente Cristina de Kirchner anunció el envío al Congreso de un proyecto de ley para cambiar el lugar de pago de la deuda y hacerlo en el país, y reabrir el canje para permitir que quienes no ingresaron lo puedan hacer, en una sorpresiva y emotiva cadena nacional.
En un intento por salvar el fallo negativo de un juez de Nueva York a favor de los ´holdouts´ que rehusaron entrar a los canjes de 2005 y 2010, el Poder Ejecutivo también decidió cambiar al banco que funciona como agente de pago de la deuda, ya que ahora será Nación Fideicomisos y no el Banco de Nueva York Mellon. El proyecto, denominado "Pago soberano local de la deuda externa de la República Argentina", buscará garantizar el pago de la deuda a tenedores de bonos, remover al Banco de Nueva York como agente reemplazándolo por Nación Fideicomiso, y reabrir el canje para los ´holdouts´, a quienes se les depositará en una cuenta los fondos como si hubiesen adherido al canje. "Se declara de interés público la restructuración de la deuda así como el pago en condiciones justas al 100% de los tenedores", señaló la jefa de Estado en referencia al proyecto que se enviará al Congreso. Indicó que la iniciativa tiene por objeto "permitirle el cobro a todos los deudores en salvaguarda de los contratos". En un mensaje grabado desde su despacho en la Casa Rosada, Cristina utilizó su vigésimo primera cadena nacional del año para anunciar el envío al Congreso de ese proyecto para reabrir el canje de deuda y cambiar el agente de colocación y pago de la deuda argentina. La iniciativa, llamada "Ley del pago soberano local", desplaza al Bank of New York Mellon de su papel de agente fiduciario y designa en su lugar a Nación Fideicomisos. Este deberá crear una cuenta especial en el Banco Central en la que el Estado depositará los pagos de la deuda a los bonistas con títulos reestructurados en 2005 y 2010. Pero el Gobierno también ofrecerá un canje voluntario de jurisdicción para bonistas que tienen en títulos emitidos bajo ley extranjera. El proyecto autoriza al Ministerio de Economía la emisión de títulos para "el 7,6 por ciento que nunca ingresó" a los canjes de 2005 y 2010. La jefa de Estado hizo el anuncio en un mensaje transmitido por cadena nacional, destacando que el proyecto de ley dispone "implementar instrumentos legales que permitan el cobro de los servicios correspondientes al 100 por ciento" de los tenedores de títulos emitidos en los canjes de 2005 y 2010. La jefa de Estado remarcó que si los holdouts acceden a esta propuesta de canje "les va a permitir tener ganancias superiores al 300 por ciento". Si aceptan entrar en esta nueva apertura del canje podrán cobrar los nuevos bonos emitidos bajo ley argentina. Esto, especula el Gobierno, permitiría esquivar las trabas determinadas por el juez estadounidense Thomas Griesa. A su vez, el Gobierno propone reabrir el canje para que puedan ingresar los bonistas que quedaron afuera, incluidos los fondos buitre. Con ojos vidriosos y voz entrecortada, la jefa de Estado dijo: "Estoy un poco nerviosa, realmente siento que estamos viviendo un momento de mucha injusticia", y recordó que "por lo general no estoy así". La mandataria se quejó de que el juez de Nueva York Thomas Griesa "actúa manifiestamente a favor" de los fondos buitre y agregó que "eso se nota en la versión taquigráfica" de las audiencias mantenidas con abogados de la Argentina y de esas organizaciones. Sostuvo que el juez, "al no poder embargar bienes de la Argentina, lo hizo con los recursos depositados para los tenedores de bonos" que entraron al canje. "Una medida insólita de apropiarse de fondos de terceros", afirmó, y agregó que "la Argentina concurrió a todas las audiencia y hasta un ministro de Economía tuvo dos reuniones con los representantes de los fondos buitre para intentar llegar a un acuerdo y fue imposible". Advirtió que "el negocio de los fondos buitre es no negociar, porque mediante el acoso judicial intentan cobrar la totalidad de la deuda" y dijo que el juez Griesa "inventó una nueva forma de coacción" a favor de estas organizaciones. En un mensaje grabado y emitido con poco aviso previo por cadena nacional, recordó que "con los fondos buitre también intentamos negociar, pero el negocio de ellos es no negociar". "Fueron años de desendeudamiento y desarrollo, de esa Argentina defaulteada y con todas las carencias de industria, trabajo, de derechos, también pudimos pagar gran parte de la deuda social interna, no toda, porque mientras haya un pobre nunca estaremos satisfechos", sostuvo la jefa de Estado. Dijo que la renegociación de la deuda tuvo como objetivo "lograr la continuidad del país y la viabilidad de la República Argentina". El massismo no votará proyecto de deuda y presentará una ley propia
En línea con la UCR y el PRO, el Frente Renovador no votará a favor del proyecto de ley enviado por el Poder Ejecutivo al Congreso para cumplir con el pago soberano de la deuda externa.
"No vamos a acompañar el Proyecto del Gobierno, pero vamos a proponer nuestra alternativa", dijo el líder del FR, Sergio Massa, en una conferencia brindada en un teatro junto a su equipo de economistas. "Vamos a tratar de convencer a otros sectores, respecto de las virtudes de la propuesta que estamos haciendo", enfatizó el diputado nacional. "No hay que tratar este tema como si fuera una compulsa", consideró. El massismo se suma así al rechazo ya expresado por Mauricio Macri y por Ernesto Sanz, los jefes del PRO y el radicalismo respectivamente. También los legisladores de izquierda anticiparon que no acompañarán. A esta altura, queda cómo incógnita qué votarán los integrantes de UNEN, el FAP y algunos peronistas díscolos. "Nosotros queremos aportar a la solución, no ser parte del problema", señaló Massa en la escueta conferencia. "Nosotros fijamos pautas que creemos que pueden servir a solucionar este problema", agregó. En ese marco, sostuvo que el FR llegó "a la política a sumar no a dividir" y aseguró que "más allá de este presente de incertidumbre la Argentina tiene futuro". "Tenemos la obligación de construir un futuro mejor", dijo el exjefe de Gabinete de Cristina de Kirchner. A pesar del rechazo opositor, se estima que el proyecto comenzará a ser debatido en el Senado el próximo miércoles en un plenario de comisiones. En tanto, se espera que llegue al recinto el 3 de septiembre. La norma, bautizada ley de "Pago Soberano Local de la Deuda Exterior de la República Argentina", cambia el domicilio de pago a bonistas, habilita un nuevo canje voluntario y cambia al Bank of New York por Nación Fideicomisos como agente de pago. Sobre el escenario, acompañando a Massa, estuvieron el exsecretario de Industria de Néstor Kirchner,Miguel Peirano, los expresidentes del BCRA, Aldo Pignanelli y Martín Redrado, el diputado industrial,José Ignacio De Mendiguren, y los economistas Marco Lavagna y Ricardo Delgado, entre otros. |
La deuda es un mecanismo de sometimiento imperialista01 JUL 2004 | Desde el PTS hemos iniciado una campaña para rechazar la entrega a los usureros. ¡Que el pueblo decida! Proponemos luchar por el no pago de la deuda externa y contra el envìo de tropas a Haití, y por un referéndum, plebliscito o consulta popular vinculante para que se exprese la voluntad popular. El diputado Luis Zamora, por su parte, presentó un proyecto de ley por una consulta popular donde plantea: “Deuda externa: o se interrumpen los pagos y las negociaciones para que sea el pueblo el que decida o continúa decidiendo el gobierno nacional”. En caso de que triunfe la primera opción, propone una nueva consulta sobre el pago o no pago de la deuda externa. Aunque la propuesta de Autodeterminación y Libertad separa la cuestión democrática elemental de quién debe decidir, de la lucha por el no pago de la deuda (lo que deja para una segunda consulta) en los fundamentos del proyecto de ley señala que “tenemos que arrancar ese derecho democrático elemental (...) como pueblo (...) recorrer caminos de autodeterminación y autoorganización (...) los de ‘arriba' no hablarán por nosotros”. Por eso reiteramos nuestro llamado a A y L y al PO (que ha planteado una propuesta similar) y a todos los que quieren enfrentar esta estafa, a unir fuerzas en una gran campaña nacional. |
EL PAIS › MACRI ANUNCIO QUE NO ACOMPAÑARAN LOS PROYECTOS DEL OFICIALISMO
El PRO vota todo negativo
El macrismo votará en contra de la iniciativa que establece a Buenos Aires como lugar de pago de los bonos reestructurados y de las modificaciones a la Ley de Abastecimiento. “Nosotros no vamos a aplaudir otro default en el Congreso”, dijo Macri.
Como parte de su estrategia para posicionarse para las elecciones presidenciales, Mauricio Macri salió ayer a anunciar que sus bloques en el Senado y en Diputados votarán en contra de la iniciativa que anunció la presidenta Cristina Fernández de Kirchner en cadena nacional por la que se le dará la opción a los bonistas para cambiar la ruta de pago. Sus legisladores también se opondrán a las otras iniciativas que presentó el oficialismo, tanto las modificaciones a la Ley de Abastecimiento como las referidas a los derechos de los consumidores.Al día siguiente de la cadena nacional de CFK, el todavía procesado jefe de Gobierno picó en punta para plantear su postura en una conferencia de prensa por la mañana. El líder del PRO afirmó: “Nosotros no vamos a aplaudir otro default en el Congreso, como hicieron muchos en 2002”. Macri anunció así que su bloque de 3 senadores y sus 18 diputados se van a oponer a la iniciativa que enviará el gobierno nacional. Antes, la senadora del PRO Gabriela Michetti había anticipado a este diario el rechazo de los proyectos en defensa del consumidor. El rechazo absoluto de todos los proyectos lo ubica a Macri frente a una posición más intransigente que la de Sergio Massa, quien –a su vez– acusó al líder del PRO de hacer “seguidismos de Griesa”.
Sobre la disputa con los buitres, Macri ya había fijado su posición hace un mes: “Ahora hay que ir, sentarse en el tribunal de Griesa y lo que él termine diciendo hay que hacerlo”. Por si quedaban dudas, el jefe de Gobierno advirtió: “Si hay que pagar al contado, se pagará al contado”. No dio pistas sobre qué propondría hacer con la cláusula RUFO y con la consecuente caída de la reestructuración de la deuda en los canjes de 2005 y 2010 que habría sobrevenido en ese escenario.
Consistente con esa posición, Macri anunció que se opondrá a cualquier otro camino que no sea pagar a los buitres. “Lamentablemente, significaría volver a quedar en el lugar de los países no confiables y no creíbles. Esto va a agudizar los problemas que tenemos hoy en términos de recesión económica y relaciones con el mundo”, dijo. Para graficar su posición, Macri recurrió a una curiosa comparación: “Es como si nosotros ahora dijéramos que la final del Mundial no vale, porque el arquero de Alemania hizo penal y entonces los invitamos a jugar otro partido en Argentina y ponemos a Oyarbide como juez”.
Sobre los cambios en la Ley de Abastecimiento, Macri afirmó: “Ya sabemos que este tipo de medidas y situaciones son pan para hoy y hambre para mañana. Esto no va a traer trabajo para los argentinos ni va a traer el financiamiento que necesita YPF para desarrollar Vaca Muerta. No es cuestión de eslóganes o de consignas. Lo importante es la realidad y esto agrava la recesión, el desempleo y el problema inflacionario”.
“¿Griesa vendría a ser mejor que Oyarbide sólo porque nació en EE.UU? ¿Eso sería lo que nos dice Macri?”, se preguntó la legisladora de Nuevo Encuentro Gabriela Cerruti. Sobre la comparación con la final de Mundial, acotó: “Y, además, fue penal”.
Por su parte, Aníbal Ibarra advirtió que “Macri opina sobre una deuda que el gobierno nacional no generó, pero no sobre el grosero endeudamiento que él generó en la Ciudad: en abril de 2015, la Ciudad tendrá que pagar 475 millones de dólares por vencimientos de deuda externa generada por Macri”. En el mismo sentido, el legislador sabbatellista José Cruz Campagnoli indicó que “Macri manifiesta su esencia. No le importa el futuro de la patria, sino los intereses de un grupo de buitres amparados por un juez neoyorquino que intenta saquear a la Argentina”.
“Macri agita el fantasma del default para intentar convencer a los argentinos de que tenemos que someternos a las extorsiones de un grupo de especuladores financieros con inmenso poder de lobby en la Justicia norteamericana”, advirtió Campagnoli, quien dijo: “Como día a día lo demuestra la Presidenta, no vamos a permitir que los destinos de la patria los definan los poderes económicos concentrados ni sus voceros en nuestro país”.
UCR
El radicalismo anticipó su rechazó al proyecto sobre el canje de deuda
En declaraciones a la prensa, antes de participar del encuentro de legisladores nacionales de la UCR, Sanz anticipó que la mayoría de los legisladores de su partido se van a oponer a la iniciativa oficial.
En declaraciones a la prensa, antes de participar del encuentro de legisladores nacionales de la UCR, Sanz anticipó que la mayoría de los legisladores de su partido van a votar "en contra" del proyecto oficial para reabrir del canje de la deuda externa y modificar la sede de pago. "Lo que nos preocupa -señaló Sanz-, es que las consecuencias que hoy se tomen tienen la implicancia en la inversión, en las decisiones de inversión y en la economía que está cada vez más recesiva". Por su parte, el diputado nacional Julio Cobos, consideró que su partido debe tomar una postura "definitiva" en relación a a las políticas de alianzas con vistas a los comicios del 2015. En relación a UNEN, señaló que "salvo el espacio" que lidera Elisa Carrió, "todos están conformes con la consolidación de este espacio", y estimó que en el plenario de hoy podría definirse si buscan o no sumar al PRO, que lidera Mauricio Macri al frente. |
jueves, 23 de octubre de 2014
Alejandro y la deuda
La
Deuda Externa y Alejandro
Olmos (desconocido por muchos
ALEJANDRO OLMOS
Investigando un poco acerca de la deuda externa, "descubrí" a este periodista que considero, fue verdaderamente independiente en su pensar y en su accionar, peleándose desde joven con el gobierno que estuviera de turno, lo que le valió ser perseguido, encarcelado y amenazado en incontables número de veces. Inclusive llegó a estar en desacuerdo con aquellos con quienes compartía afinidad política, lo que habla de una independencia de criterios impresionante, sobre todo si se tiene en cuenta que adhirió al gobierno de Perón, y no tuvo pelos en la lengua para criticarlo cuando consideró que éste estaba equivocado.
Prácticamente dedicó su vida a investigar sobre la ilegitimidad de la deuda externa en la argentina, deuda que se vió acrecentada desde la época de la última dictadura militar, pasando por los subsiguientes gobiernos democráticos, hasta el día de hoy...
Biografía de Alejandro Olmos
Alejandro Olmos fue un político importante en la segunda mitad del siglo XX a pesar de que no ocupara cargos ni figurara su nombre en los medios de comunicación masiva. Fue un periodista notable, de pluma tocante, emotiva y valiente. Fue un escritor y pensador político privilegiado, cuya palabra oral o escrita se escuchó con respeto. Y fue un bohemio, capaz de tumbar tabúes como el de la deuda externa, pero incapaz de sacar provecho personal de los valiosos servicios a
Ha sido sistemáticamente silenciado, podría decirse ocultado; al punto que Norberto Galasso en el bosquejo biográfico realizado para la reciente cuarta edición del libro de Olmos sobre '
Sin embargo Olmos en los años '40 fue un joven político que se entrevistó asiduamente con Juan D. Perón, con Evita, con John W. Cooke, los curas Hernán Benítez, Virgilio Filippo, dirigentes de todos los partidos y que en los años '50 adquirió notoriedad en la resistencia contra la dictadura militar.
Fue un periodista brillante, que llegó a Buenos Aires desde Tucumán durante la 'década infame' acompañando nada menos que a José Luis Torres, para después actuar junto a otros grandes, como Enrique Oliva (Francois Lepot), Fernando García della Costa, Américo Barrios, Atilio García Mellid, Valentín Thiebaut, Rodolfo Walsh y tantos más.
Fue estudioso, pensador político y escritor que alternó inquietudes intelectuales con Raúl Scalabrini Ortiz, Arturo Jauretche, Leonardo Castellani, Leopoldo Marechal, Ernesto Palacio, Arturo Sampay, José María Castiñeira de Dios, Fermín Chávez, José María Rosa, Osvaldo Guglielmino y muchos otros.
La familia Olmos es una estirpe arraigada en Tucumán: apellido castellano de tenientes gobernadores coloniales del siglo XVII, de militares y funcionarios de
Algunos pantallazos de la fecunda vida de Alejandro Olmos ilustran acabadamente su accionar político desde 1945, cuando ingresó con sus ideas nacionales al naciente movimiento peronista. En agosto de 1946 ya se estaba oponiendo a que el gobierno de Perón ratifique las Actas de Chapultepec y la creación de
En noviembre de 1955, pocas semanas después del golpe de Estado que derrocó a Perón, Olmos comenzó a publicar 'Palabra Argentina', periódico tabloide de ocho páginas que componía el taller de Fontevecchia (padre), desde donde combatió a la dictadura militar pese a que el Decreto 4161 calificaba como delito cualquier publicación peronista. Cambió varias veces de formato, de periodicidad, de imprenta, mas invariablemente sufrió persecución, allanamientos, secuestro de ediciones, censura y cárcel. Nada lo detuvo porque 'Palabra Argentina' circulaba de mano en mano en miles de ejemplares que se editaban en la clandestinidad, como recordó Miguel A. Moyano en su obra sobre el periodismo de la resistencia.
Fustigó desde allí la derogación por bando militar de
Con similar entusiasmo participó Olmos de las inquietudes del 'revisionismo histórico', realizando trabajos relativos a las relaciones de José de San Martín con Juan Manuel de Rosas en el seno del Instituto de Investigaciones Históricas que lleva el nombre de éste y organizando al promediar el siglo una 'Comisión de Repatriación' que estuvo integrada por personalidades: Manuel Gálvez, Ernesto Palacio, José María Rosa, John W. Cooke, Luis Soler Cañas y otros. Es que Olmos fue celoso de
Cuando algunos revisionistas se embarcaron en el golpe militar de 1955, Olmos les dijo: 'Amigos, ustedes están equivocados. Esto es un nuevo Caseros'. Y en 1973 cuando otros amigos quisieron proponerlo para cargos en el gobierno democrático instalado ese año, Olmos les contesto: 'Yo no sirvo para esto; en los momentos difíciles, sí. En los del triunfo, no'.
Y los instantes dramáticos volvieron en 1976, cuando se reintegró a la lucha. Dudas no caben que la mayor virtud de Olmos fue haber desnudado entonces la deuda externa 'que siempre nos ocultaron', como decía él. 'La mayor estafa al pueblo argentino', como la calificó Diego Musiak en un film documental que resume los desvelos de Olmos.
Estaba dando sus últimos coletazos el Proceso militar en 1982 cuando Olmos inició una denuncia en el Juzgado Criminal Federal N° 2 destinada a arrancarle a
Olmos aportó las pruebas necesarias para demostrar que se trató de una deuda fraguada y en febrero de 1990 dio a conocer su libro 'Todo lo que usted quiso saber sobre la deuda externa' corriéndole el velo a la impudicia.
Fue groseramente silenciado porque desentonaba con la intentona neoliberal de aquella Argentina dolarizada que quería penetrar en el 'primer mundo' con euforia privatizadora y seducida por el apetito de las 'relaciones carnales'.
Olmos nos mostró la realidad que muchos no quisieron ver. Aportó pruebas, documentos, testimonios, pidió indagatorias, informes, pericias, que decían como se habían endeudado las empresas públicas y el país perjudicando al Estado nacional y permitiendo lucros indebidos de los acreedores.
Como
Olmos no sólo ejerció su apostolado por el interior del país, sino que también concurrió especialmente invitado a foros internacionales, donde demostró la realidad y el fraude del endeudamiento de naciones sometidas al imperialismo financiero.
Pocos días antes de morir Norberto Chindemi le hizo un hermoso reportaje. El cuerpo de Olmos se agotaba pero su pensamiento era viril, conservaba la fuerza de siempre. Por ello sus convicciones trascendieron su vida mundana.
Finalmente, después de dieciocho años, cuando ya Olmos había fallecido, el Juez Jorge Ballesteros en Buenos Aires dictó sentencia considerando prescripta la acción penal, pero con la particularidad de reputar veraces numerosas denuncias, elevando las actuaciones al Congreso de
Desde entonces, hasta el FMI ha debido hacer su autocrítica sobre la deuda externa argentina; incluso admitió alguno de sus errores.
El que no ha reaccionado aún es el Congreso Nacional, como cuando Alejandro Olmos transitaba estos pasillos reclamando infructuosamente el cumplimiento del precepto constitucional que lo obliga a actuar en cualquier arreglo de la deuda externa.
Por eso, todos valoramos este homenaje de senadores y diputados que hace alentar esperanzas de que el Congreso un día no lejano cumpla con la cláusula que
Será entonces cuando el recuerdo de Olmos se convierta en voz de la conciencia colectiva para lograr del Congreso una decisión histórica que ponga fin a esta estafa contra todos los argentinos.
TRIBUNAL DE
Durante el desarrollo del Tribunal, el caso emblemático de
A continuación, lo que expuso Olmos en Río de Janeiro
dijo:
"Traigo a
este Tribunal, instituido por los más representativos sectores del pueblo
brasileño, el testimonio del "caso argentino" en el marco del sistema
de endeudamiento externo que afecta a los países sojuzgados por la
superestructura del poder financiero. El testimonio, que vengo a exponer al conocimiento
de los hermanos del Brasil, tiene el valor relevante de conformar la causa
judicial más importante que sustancian los tribunales argentinos. Nosotros
tenemos, compañeros, el triste privilegio de haber llevado a cabo una
investigación penal de la deuda externa. Deuda que configura la mayor estafa en
la historia de los argentinos. He sido, Sres. Jueces, el denunciante -ante la
justicia federal de mi país- de este escandaloso fraude. Y desde 1982, en pleno
ejercicio del poder por la
Junta Militar de la dictadura de entonces, vengo impulsando
-hasta ahora- una investigación judicial que ha acumulado todas las pruebas de
esa estafa. Traigo, pues, una visión que escapa a los números que manejan los
tecnócratas de la economía, porque la deuda externa argentina es el resultado
de una gigantesca maniobra de dominación mediante procedimientos previstos y
reprimidos por la ley penal. Los peritos judiciales que llevaron a cabo una
profunda investigación en los organismos del Estado dictaminaron que los actos de
endeudamiento constituyeron actos ilícitos. Y, obviamente, no puede ser
legítima una deuda generada en formas delictivas de una planificación
económica. Esta visión de la deuda no es caprichosa ni conjetural sino que
surge de un voluminoso proceso judicial en el cual las pericias producidas
constituyen una parte fundamental de la prueba y tales peritos, Sres. Jueces,
no se hallan afectados por parcialidades ideológicas. Los mismos integraron una
Comisión ad-hoc designada por el Tribunal Federal y se constituyó con expertos
propuestos por la
Academia Nacional de Ciencias Económicas, la Facultad de Ciencias
Económicas y el Consejo Profesional de Ciencias económicas. Los mismos actuaron
en forma conjunta con los Peritos Contadores del Poder Judicial. Expertos y
Peritos indagaron en el Banco Central de la República Argentina
y en las empresas del Estado. Y entre ellas destaco –como caso ejemplar de una
ignominia- a YPF, la petrolera nacional que figuraba entre las de mayor
facturación en América Latina. La investigación pericial determinó que a YPF se
le atribuía una deuda externa del orden de los 6.000 millones de dólares pero
que a YPF no había ingresado un solo dólar (!). Las empresas del Estado eran
utilizadas como "prestanombres" en los acuerdos de préstamo externo.
Y las divisas que entraban en virtud de tales acuerdos eran retenidas por el
Banco Central. La explicación dada al Tribunal, por los responsables del
sistema fue que tales divisas se destinaban a la "apertura
económica". Con dos palabras se pretendía justificar una forma del saqueo.
Este supuesto endeudamiento de YPF -originado en el gobierno de la dictadura
militar- fue utilizado por los gobiernos constitucionales de mi país para
resolver su "privatización" a precio vil. Se mostró la falsa imagen de
una empresa parasitaria y endeudada para justificar la necesidad de su entrega
a la voracidad del capital privado. YPF, Sres. Jueces, sólo recibía el 25% del
producto de sus ventas, el 85% restante era absorbido por un Estado sometido a
las directivas del Fondo Monetario y a los intereses del dominante poder
financiero. La falsedad del endeudamiento fue admitida por todos los que
integraron el directorio de YPF en la composición de sus distintas etapas. El
General Luís Pagliere –que integró ese directorio en representación del
Ejército durante el gobierno militar- declaró ante el Tribunal que YPF estaba
obligada a producir "a pérdida" por instrucciones del Ministerio de
Economía, ya que el precio del petróleo vendido a la Shell y a la Esso representaba el 50% del
valor que YPF gastaba por su extracción. Me he referido, puntual y someramente,
a YPF como un caso testigo del fraude instrumentado contra los intereses del
Estado y del pueblo de mi país. Es tan sólo un ejemplo de cómo se destruye,
desde adentro, una economía nacional conducida por funcionarios al servicio de
intereses espúreos y en exclusivo beneficio de su propio lucro. En esta
investigación judicial el Dr. José Alfredo Martínez de Hoz, primer Ministro de
Economía del gobierno militar y protagonista autoral de la política económica
iniciada en 1976, fue procesado por defraudación al Estado. Precisamente, por
el endeudamiento externo que él iniciara al amparo de las armas que produjeron
el mayor de los genocidios. Cuando Martínez de Hoz declara ante el Tribunal
explica que, en la época en que él asumiera el Ministerio, el mundo afrontaba
la amenaza de un "crack" internacional que podía producir la
desestabilización de todo el sistema financiero. Esto como consecuencia del
exceso de dólares generado como efecto del boom del petróleo. Los bancos se
encontraban, entonces, con una enorme liquidez por los depósitos realizados por
los países productores de petróleo. Esto determinó que, reunido el Fondo
Monetario, el Banco Mundial y los distintos organismos financieros, encontraran
como solución destinar esta enorme masa de dólares a países que pudieran
absorberlos como créditos. La
Argentina fue uno de los países elegidos. Fue así que de una
deuda externa de 8.000 millones de dólares a principios de 1976, dicha cifra
trepó a 43.500 millones en 1983. Al finalizar el gobierno militar. Por
declaración judicial de los gerentes del Banco Central quedó establecido que en
el Banco Central actuaba un ejecutivo del Fondo Monetario encargado de
monitorear hasta qué punto podía aguantar la Argentina este forzado
endeudamiento. Un ejecutivo "licenciado" por el Fondo y contratado
por el Banco Central de la
Argentina. Pero que trabajaba para el Fondo. Pues bien, esa
deuda original de 8.000 millones que había alcanzado los 43.500 millones al
terminar el gobierno militar reemplazado por el presidente constitucional
Alfonsín, llegó al nivel de los 65.000 millones al asumir el actual Presidente
Menem. Hoy el actual gobierno alude a un nivel de 115.000 millones de dólares,
mientras el Banco Mundial señala, como deuda externa argentina, cifras que
superan los 130.000 millones. Otros economistas de mi país sostienen que tal
deuda se hallaría próxima a los 200.000 millones. Nos encontramos, pues, ante
una situación en la cual las cifras de endeudamiento carecen de validez
demostrable. Y esto es así porque no existen registros contables de la deuda
externa. Esta afirmación puede sorprender, pero su fundamento reside en la
información oficial del Ministerio de Economía al Tribunal Federal que tiene a
su cargo la investigación de la deuda. Información que incluye, también, el
reconocimiento de que se ignora los avales concedidos por el Estado. Este
cuadro, de tremenda gravedad, es reiteración de una situación anterior, cuando
yo promoviera la investigación de los ilícitos del gobierno militar y, en
especial de la deuda externa. En aquella oportunidad el juez interviniente
reclamó al Banco Central un informe completo de la deuda incluyendo perfil de
vencimientos y listado de acreedores y deudores. La respuesta fue insólita. El
Banco Central no tenía registrada la deuda externa. Y sólo disponía de datos
estadísticos sin validez contable. No quiero abundar en detalles, hechos y
circunstancias que marcan a fuego el crimen de la deuda externa argentina. La
exposición del cuadro completo de los procedimientos y efectos devastadores del
endeudamiento externo insumiría un tiempo de atención de los señores jueces de
este Tribunal que yo no puedo permitirme. Basta con señalar –como explicación
de esta síntesis- que la investigación de la deuda argentina ha acumulado más
de 30 cuerpos principales de expediente y más de 500 anexos. Estos últimos se
guardan, por razones de seguridad, en el Gran Tesoro del Banco Central. En esta
investigación debieron comparecer, a prestar declaración, todos los que
integraron la conducción económica de mi país, desde el golpe militar del 24 de
marzo de 1976 hasta hoy. Lo hicieron, también, los directores del Banco Central
y de las empresas públicas. Y a esas pruebas testimoniales se suman las
documentales. Todo lo cual permite sostener la afirmación del gigantesco fraude
al que me refería en los inicios de esta exposición. Fraude cuyo proceso de
ejecución continúa. Como también continúa la investigación judicial sobre ese
fraude. Yo le atribuyo a la investigación que vengo impulsando en mi país el
valor de una contribución a la lucha continental contra la deuda. El "caso
argentino" debe servir a los pueblos hermanos de América Latina para
mostrar, en toda su crudeza, la aplicación de un método de dominación que ha
consagrado una nueva forma de esclavitud del hombre y de los pueblos. La
esclavitud al poder financiero de la usura y de la globalización como arma para
impedir las reacciones nacionales de nuestros países. En cada acuerdo de
endeudamiento externo de la
Argentina se pactó, siempre, el sometimiento a la
jurisdicción de tribunales extranjeros. Fundamentalmente de Londres y Nueva
York. Y para que esto fuera posible se llegó al extremo de modificar las leyes
argentinas de procedimiento, en los días siguientes a la instauración de la
dictadura. Sometimiento convalidado por los gobiernos constitucionales de
Alfonsín y de Menem. Lo que demuestra, palmariamente, cual es el centro del
poder en mi país. Y creo, con perdón de los hermanos brasileños y de todos los
compatriotas de la
Patria Grande de nuestra América, que todos nuestros pueblos
han sido objeto del mismo sistema de dominación por vía de la deuda externa.
Nosotros agradecemos profundamente la convocatoria papal al Jubileo del Año
2000. Pero le damos una significación que trasciende a las entrañas mismas de
nuestros pueblos. El jubileo debe ser una reparación a los pueblos castigados
por el saqueo y por la usura. Y así como en el caso argentino se le impone al
país el pago de una deuda que el país no tiene, la mayoría de los países
endeudados deben afrontar, con toda seguridad, la misma situación de afrontar
el pago de un tributo al dominio imperial de la banca internacional. Juan Pablo
II afirmaba a los obispos argentinos que la cancelación de la deuda era un acto
de justicia, porque esa deuda ya había sido pagada. Esta es una declaración
papal y de cuya fe pueden dar testimonio los obispos de mi país. Y esa deuda ha
sido pagada, en efecto. Y en la investigación judicial argentina está probado.
El jubileo convocado por el Papa debe ser oportunidad, además, para acreditar
la ilegitimidad de una deuda cuya naturaleza exime de su pago a nuestros
pueblos. No son nuestros pueblos los que deben rendir cuentas de una deuda impuesta
por las transnacionales del nuevo imperialismo. Son los supuestos acreedores
los que deben rendir cuenta a nuestros pueblos por los intereses cobrados con
el hambre, la sangre y la vida de quienes nada debían, pero que, sin embargo,
pagaban. Señores Jueces: Es éste un Tribunal que registrará la voluntad de
justicia de los hermanos brasileños. También en nuestro país ha funcionado ý
continuará haciéndolo- un Tribunal Autónomo del Pueblo que inició su actividad
hace dos años. Estos juzgamientos, organizados por la decisión del pueblo,
deben perseguir algo más que una sanción moral a los responsables de la
ignominia que acusamos. Yo no vengo a alentar rebeliones populares, pero sí a
sostener la necesidad de la unidad de nuestros pueblos para resistir al despojo
que nos imponen intereses sin patria y sin moral. En mi país estamos convocando
a no pagar lo que no debemos y a señalar a quienes cargaron, sobre nuestras
espaldas, el peso de una deuda fraudulenta. Yo, señores jueces, no soy un
jurista. Y más que militante del derecho soy un militante de la justicia. Sobre
el derecho pesan los intereses y la fuerza. La Justicia es un mandato de
Dios y una virtud de la conciencia. Esa es nuestra fuerza frente a quienes,
como en el drama de Shakespeare, se cobran en libras de carne los intereses de
una deuda forzosa. Dejo expuesto, ante este Tribunal el caso argentino, que
ofrezco como testimonio de una lucha por la liberación y la justicia. Si ello
sirve a los hermanos pueblos de Latinoamérica para impugnar una deuda ilegítima
como la argentina, la lucha llevada en nuestro país no habrá sido estéril.
Cuando el Presidente Sarney se dirigía a la Nación anunciando la suspensión del pago de los
intereses de la deuda, afirmaba que "la deuda que se cancela con la
miseria, se paga con la democracia". Es ésta una advertencia que no
podemos desoír quienes hemos vivido la tiranía de los usurpadores. La esperanza
de una vida más digna y de la vigencia de una verdadera justicia descansa en la
voluntad del pueblo resistiendo a la violencia de la injusticia. Frente al
hambre, a la desocupación y al saqueo levantamos una consigna: O se está al
servicio del pueblo contra la deuda, o se está contra el pueblo al servicio de
la deuda."
Fragmentos de una entrevista hecha a Alejandro Olmos Gaona, hijo de Alejandro Olmos quien impulsó la causa penal que determinó el origen ilícito de la deuda pública de Argentina, por el Periódico VAS. (Está subrayado lo que consideré más importante)
P. Vas : ¿Está probada la ilicitud de
A. O.: En la causa que iniciara mi padre se detectaron más de 470 operaciones ilegítimas. Existen contratos de deuda manifiestamente ilegales: no responden al orden legal de
P. Vas : ¿Por qué le llama Deuda Odiosa?
A. O.: Porque una deuda odiosa es aquella que ha contraído un Estado y no ha sido utilizada en beneficio del pueblo de ese Estado. El Banco Mundial, certificó que la deuda contraída durante la dictadura en nuestro país fue utilizada en: un 40% para fuga de capitales, un 30 % en pago de intereses de la deuda y un 30 % en compra de armamentos. O sea que el pueblo no vio un centavo. Algunas personas creen que la deuda es odiosa porque fue contraída por una dictadura. La deuda Argentina es odiosa desde todo punto vista: fue contraída por una dictadura, no fue utilizada en beneficio del pueblo, se fugaron capitales y se compraron armas. Pero, estrictamente el término "deuda odiosa" no tiene nada que ver con un gobierno dictatorial. En Derecho Internacional, lo que se firma es con prescindencia de la legitimidad del gobierno que lo haya firmado, sea un régimen de facto o de derecho. Lo paradójico, es que el autor de la teoría de la "deuda odiosa" es el propio Estados Unidos, fueron sus juristas quienes establecieron que una deuda debía ser repudiada cuando no había sido contraída en beneficio del pueblo. Y es lo que está planteando en Irak en este momento, para quedarse con ese país pero sin la deuda externa europea.
P. Vas : ¿La gente adhirió a esta medida, o más bien fue una manipulación mediática?
A. O.: No me cabe duda de que se creó toda una parafernalia mediática. Pero también hay mucha gente que está encantada. Por ejemplo: hace dos meses Hebe de Bonafini me dijo: "Todo lo que hagas sobre la deuda, yo te lo firmo". Ahora apoya el pago de Kirchner. Nora Cortiñas, en cambio, firmó el amparo que presentamos ante la justicia. Lo lamentable es que uno asocia: Nora dice que no, entonces a Nora no le dan un peso. Hebe, tiene una Universidad, un hotel monumental... Es duro pensar esto, pero finalmente se concluye que las cuestiones políticas se negocian a través de los intereses particulares.
P. Vas : ¿No hubo ningún tipo de control sobre esas operaciones?
A. O.: El Congreso de
P. Vas : ¿Cómo afecta en la vida cotidiana la deuda externa?
A. O.: En la vida cotidiana, el efecto es inmediato: lo que compramos todos los días en la panadería, en el supermercado, en la librería, en cualquier comercio del barrio, tributa un impuesto. Parte importante de ese impuesto va a pagar la deuda externa. Nosotros estamos tributando todos los días para pagar algo que no debemos. Nos están sacando plata del bolsillo para pagar un fraude.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)